Viajar era, en el siglo XVIII, una actividad que formaba parte de las obligaciones del intelectual ilustrado. El viaje tenÃa una dimensión social: habÃa que publicar, difundir los resultados de esa ilustración adquiriday contribuir asà al progreso del paÃs. Nada más lejos de la intención de estas Apuntaciones sueltas de Inglaterra, que MoratÃn jamás pensó en editar y que recogen sus impresiones sobre la vida y las costumbres de la sociedad inglesa en torno a 1793. Incapaz de adoptar un punto de vista imparcial y objetivo, MoratÃn compara lo extranjero con lo nacional para subrayar la distancia entre España y Europa, se burlasocarronamente de la inglesa ceremonia del té o bien muestra su perplejidad ante la libertad de que goza la mujer inglesa. Un texto atÃpico y original para su época pero que precisamente por eso permaneceindemne frente a los estragos del tiempo.