Considerado uno de los grandes antropólogos franceses del siglo XX, Philippe Descola realiza sus primeros trabajos de campo en la Amazonia. Como etnógrafo, convive durante años con los jíbaros achuar, observando la relación que estos amerindios mantienen con los demás seres de la naturaleza. Como etnólogo, demuestra que la tradicional oposición occidental entre naturaleza y cultura no se observa entre los achuar, quienes atribuyen características humanas a la naturaleza. Por último, como antropólogo, define cuatro formas de relación con el mundo —totemismo, animismo, naturalismo y analogismo— que ayudan a explicar la relación del hombre con su entorno.
En un texto claro y didáctico, Philippe Descola repasa las principales etapas de su recorrido y nos ofrece una apasionante introducción a la práctica de la antropología y a una «ecología de las relaciones».