Ohhhhh! ¡Qué bonito! -dicen todos los niños y las niñas cuando llegan al campo. Prados verdes y árboles floridos, pájaros que vuelan y cantan. Ton trae cerezas para hacerse unos pendientes. A la hora de marchar, se llevan del campo belleza y alegría. Al autocar y ¡hacia casa!
Una historia sobre la sensibilidad, la curiosidad, el cuidado hacia los animales y el respeto por la naturaleza.
Con la colección Los Peques hemos recuperado los cuentos sin palabras de Pia Vilarrubias publicados por la Editorial Juventud hace 40 años. Estas historias sin palabras les resultarán muy familiares y son un estímulo para animar a los niños de 1 a 3 años a hablar. En ellas se dibujan hechos cotidianos como levantarse por la mañana, lavarse, vestirse o ir a la escuela. La idea es que los niños puedan explicarlos a sus amigos, hermanos, padres y maestros, usando sus propias palabras y según sus posibilidades.
Para los adultos es la oportunidad de sentarse con ellos y compartir un tiempo comunicativo de calidad, sin prisas. Se trata de observar las imágenes y encontrar en cada una un sentido “porque es hablando que los pequeños encuentran sus maneras de contar”.
Pia Vilarrubias se inicia en la ilustración a principios de 1970 a partir de una larga estancia en Ginebra que le permite ampliar su formación en el Instituto Jean-Jacques Rousseau. En la escuela adjunta de esa ciudad, la “École Maternelle Maison des Petits”, entra en contacto con las corrientes psico-pedagógicas más innovadoras del momento. El pensamiento de Jean Piaget le aportará una nueva mirada sobre la manera de entender la educación y la profesión de maestra. A partir de ese momento une su doble vocación de dibujante y pedagoga y crea una colección de historias cortas dibujadas. Cuentos en forma de metáforas que permiten conectar a niños y adultos con las situaciones afectivas y de descubrimiento propias del mundo infantil. Cuenta con 50 historias publicadas hasta el momento.
