La novela se desarrolla en Cádiz y provincia. En lenguaje ameno, se narran las peripecias del inspector de policía Cañete, conocido en los bajos fondos como Charli, durante la investigación de un extraño homicidio. El homicidio de un joven que ha aparecido flotando en la rompiente del Baluarte de la Candelaria. Las primeras pesquisas apuntan a que el cuerpo pudo servir de paredro en un primitivo ritual a Melkhart, dios fenicio de la guerra.