Esta turbadora novela reconstruye uno de los casos de la crónica de sucesos más atroces de estos últimos años: en agosto de 1984, en una pequeña ciudad austriaca, Josef Fritzl rapta a Elisabeth, su hija de dieciocho años, y la encierra en un búnker nuclear proyectado por él y construido en los cimientos de su propia vivienda. La mantendrá prisionera durante casi veinticuatro años, y de las repetidas relaciones incestuosas a las que la obligará nacerán siete hijos. Elisabeth es la protagonista absoluta de una historia que agarra al lector y lo lanza a un laberinto de amor y locura, de terror y deseo. «La novela de Paolo Sortino tiene la valentía inconsciente y perfecta de un incendio que devora los cuerpos y el tiempo» (Giorgio Vasta, Il Manifesto).