Surgido de una forma de expresión artística que hasta hace poco se le consideraba simple entretenimiento de masas, el personaje The Joker saltó del cómic a la pantalla grande y de ahí irrumpió como el protagonista inesperado de un debate inédito. El estreno de Guasón de Todd Phillips desató un fenómeno de discusión que rebasó los tópicos habituales del cine adaptado de la historieta y puso sobre la mesa temas políticos y sociales complejos. Una explosión a la que no han sido ajenos incluso quienes no gusten de la película o no la hayan visto aún. De la pantalla grande se instaló en la conversación. Y en medio de una febril efervescencia en el que cada espectador se ha transmutado en crítico y analista por medio de las redes sociales, The Joker se alza también como un fenómeno periodístico, que impone hurgar en sus orígenes, su evolución como icono de masas, las plataformas en las que ha desplegado su sicótica personalidad y los subtextos que emergen de su historia, que abarcan desde la esquizofrenia hasta el fascismo, pasando por el humor y la violencia. En este Reporte Especial convergen algunas de estas múltiples lecturas, mediante el visor literario del escritor Juan Villoro y la perspectiva político-sociológica del periodista Oswaldo Zavala. Y, por supuesto, la que resulta del recorrido histórico que ofrece Raudel Ávila de las representaciones de un payaso que simplemente causaba gracia como el de la televisión sesentera al perturbador que nació de la novela gráfica The Killing Joke. Y, por supuesto, está presente también el seguimiento noticioso de un fenómeno cuyo curso apenas comienza, del origen de la película como alternativa al cine de superhéroes a los premios, la taquilla y la carrera por el Oscar.