Para magis, de acuerdo con la educación que promueve la Compañía de Jesús, los galardones no son un fin en sí mismo, sino la consecuencia de una trayectoria profesional que promueve la justicia, la equidad y el respeto de todos los seres humanos. El éxito no está en las conquistas individuales, sino en el bien que promueve para los demás. Esta introducción sirve para explicar nuestra reacción cuando supimos que la periodista Alejandra Xanic, egresada de Ciencias de la Comunicación del ITESO, había ganado el premio Pulitzer de periodismo de investigación por un trabajo publicado en el New York Times —no hay honor mayor dentro de la tradición de la prensa liberal occidental—. El premio nos dio gusto, pero es estimulante saber por qué fue premiada. Como detective de novela, Xanic investigó durante meses una compleja trama de sobornos con los que Walmart México consiguió abrir decenas de tiendas en todo el país (la más famosa, dentro del área patrimonial de Teotihuacan). El perfil que escribió el periodista Gerardo Lammers —compañero de clases de Alejandra— retrata los valores éticos y la disciplina profesional de Xanic; reconstruye sus primeros años en el diario Siglo 21, cuando ganó el Premio Nacional de Periodismo por su cobertura de las explosiones del 22 de abril de 1992; relata su visión del periodismo de investigación en un momento en el que los medios del mundo están en crisis. En esta edición también presentamos un reportaje sobre la forma en que otras ciudades latinoamericanas consiguieron reorganizar el transporte público; un recuento de una generación de emprendedores que está desarrollando alta tecnología; una entrevista con Eduardo Rabasa, editor de Sexto Piso, una empresa editorial mexicana e independiente que ha destacado en medio del difícil contexto editorial.