El autor realiza, en este libro, un análisis bastante elaborado acerca de la relación entre el derecho y la coerción.
Ciertamente, se trata de un libro unitario, pues representa la culminación de una serie de estudios e investigaciones que han ido viendo luz como artículos publicados a lo largo de años, conferencias y clases.
Asimismo, este libro en parte es también un desafío a un modo prevaleciente de investigación en la teoría jurídica, aquel que invita a considerar que la principal o aun exclusiva tarea que compete a la Teoría del Derecho es la de identificar las propiedades esenciales del derecho.