Un cuarentón deambula por la ciudad con una sola idea, volver a jugar el juego que años antes decretó el cambio en su vida. Para ello, tendrá que encontrar a sus compañeros de entonces y, sobre todo, a sus oponentes.
Un viaje épico al pasado, a la memoria y la belleza de perseguir una pelota.
Sin estadio, sin zapatos de diseñador. Sin lujos, solo Fòbal.